Bien sabéis los que nos conocéis un poquito que ALEA está conformado por un equipo de golosos. Así que no es que os entendamos bien en esas luchas interiores cuando tenemos un dulce navideño a la vista, ¡es que las vivimos también!
Recuerdo que en nuestras primeras navidades en la clínica pasamos unas cuantas jornadas recopilando información sobre las etiquetas nutricionales de los mazapanes, turrones y polvorones. Como muchas veces no estaba claro llegamos a llamar a las empresas para que nos dieran los datos.
Y ya con todo ello bajo la manga dispusimos de las herramientas necesarias para poder hablar de ello con propiedad.
En el artículo de hoy haremos un pequeño repaso por el pasillo de los dulces de Navidad y os contaremos cómo tomarlos sin que afecte a vuestro peso y a vuestra salud.
Para empezar, voy a hablar de la parte fea del asunto: todos esos dulces aportan un montón de grasas saturadas que no son nada recomendables. Y también muchos azúcares simples.
Es por estas dos razones (que sumadas además tienen como resultado que los dulces navideños engordan mogollón) que la recomendación oficial es “cuanto menos, mejor”.
¿Pero cuánto ese ese menos?
Hablaríamos de dos o tres caprichos a la semana y solo durante la época navideña.
Hay que entender que además en esos días comemos más veces fuera de casa y ya sabemos lo que eso significa…: comidas más elaboradas, raciones más grandes, alimentos más grasos, postres especiales, bebidas y brindis…etc.
O sea, como en general durante el mes de diciembre nos pasaremos bastante, sería coherente hacer un pequeños esfuerzo y cuidar el número de dulces que tomamos en casa o en la sobremesa con amigos o familiares.
Y no solo por nuestro peso sino por también por nuestra salud: porque cada una de esas pequeñas bombas eleva nuestro colesterol y nuestra glucemia.
Veamos algunos datos:
Turrones, mazapanes y polvorones aportan por cada 100 gramos unas 550 calorías de media.
Incluso las variedades “sin azúcar” rondan esa cifra. Es cierto que ésas suelen usar azúcares aptos para diabéticos (que engordan lo mismo que los normales) o incluso edulcorantes sin calorías, pero como el contenido en grasas es el mismo (o mayor para darle mejor gusto al paladar), al final engordan casi igual. Por eso no haremos distinción, vamos a quedarnos con esa cifra: por cada 100 gramos de producto, 550 calorías.
100 g de turrón es un poquito menos que la mitad de una tableta (la tableta entera pesa 250 g).
Si partimos la tableta en 10 porciones obtendremos 10 pedazos de unos 25 gramos cada uno.
Cada uno de ellos aportará unas 135 calorías. Podríamos decir que más o menos lo que un postre.
En la imagen superior podéis ver porciones de turrón individuales. Son buena opción porque cada una pesa ente 25 y 30 gramos y no da pie a comer el resto de la tableta.
En la imagen superior podéis ver porciones de turrón individuales. Son buena opción porque cada una pesa ente 25 y 30 gramos y no da pie a comer el resto de la tableta.
Un polvorón medio pesa unos 35 gramos, por lo tanto aportará unas 190 calorías.
Esa cifra sería pasarse un poco tomándolo como postre.
Mejor podríamos dejarlo para una merienda junto a un té con sacarina o similar.
También tenéis la opción de los “bocaditos”: son polvorones como la mitad de grandes. O sea, engordan la mitad que uno normal y nos dejan el mismo gusto. Uno de esos chiquitines podría tomarse como postre en la comida o la cena junto con una infusión.
También tenéis la opción de los “bocaditos”: son polvorones como la mitad de grandes. O sea, engordan la mitad que uno normal y nos dejan el mismo gusto. Uno de esos chiquitines podría tomarse como postre en la comida o la cena junto con una infusión.
Y por último: un mazapán pesa unos 20 g. Con lo que aportará unas 110 calorías, de nuevo una cifra aceptable como postre.
¡Ah! Un detalle que sin ser un dulce es muy típico de estas fechas: las nueces.
“Los frutos secos son muy sanos”. En efecto, sí que lo son, pero tienen un pero. Engordan más incluso que lo anterior (hablaríamos de entre 560-600 calorías por cada 100 g) y es muy, muy fácil pasarse de la ración adecuada.
En concreto: 3 nueces (que pesarían sin cáscara 15 g) aportarían 90 calorías, un postre ideal.
Más allá de ese número, me temo que no estaríamos pasando.
¡Uy, uy! Se me olvidaba… El jueves que viene os daremos una idea estupenda y divertida para tener en la sobremesa de los días clave 😉
Si te quedas con ganas de más consejos para superar la Navidad…
Aquí te dejamos el artículo anterior:
Si estás pensando en perder unos kilos quizá podríamos ayudarte hasta de cuatro maneas.
Incluso hemos preparado un plan especial de Navidad que podrías conseguir en nuestra clínica de Salamanca o bien a través de nuestra clínica online.
1- Seguir este blog y aprender semana a semana trucos, recetas ligeras y hábitos saludables.
2- Seguir nuestro libro. Puedes encontrarlo en librerías o aquí.
3- Venir a nuestra consulta en Salamanca.
4- “Venir” a nuestra consulta online.
Soy María Astudillo Montero,
Especialista en Nutrición y elaboración de dietas.
Dirijo este blog.
Soy co-fundadora de ALEA.
Buenos días EQUIPAZO!! Como me gustan vuestros consejos y lo bien que nos vienen a todos!! Sois geniales. Estoy muy contenta con vosotros porque en 3 meses he perdido casi 12 kilazos y ha sido tan facil y SANO que casi no me lo creo. Agradecida es poco!! Un Saludo para todos!! Y Felices Fiestas!!
¡Muy buenos días, Lola! Tu mensaje desprende un ánimo increíble! Muchísimas gracias por compartirlo con nosotros, agradecidos estamos aquí después de leerte!!
12 kilos son un montón, mi más sincera enhorabuena por tu trabajo y tu constancia.
Aquí estamos para ayudarte en lo que podamos, y con mucho gusto!!!
Un fuerte abrazo y Feliz Navidad para ti también!
María.
Hola! Llevo con vuestro libro desde septiembre y he perdido unos 5 kilos, despacito pero sin pausa, la verdad es que estoy muy contenta, ya que yo misma estoy sorprendida por mi constancia (serán lo ricos que están los platos).
En vuestro libro señaláis que si comemos algo de turrón, dulces o bombones, debemos quitar una o dos piezas de fruta de ese día. Mi pregunta es: por ejemplo, si tomara dos bombones junto a un café o infusión para merendar, debería quitar igualmente las piezas de fruta? (mi idea es tomar los bombones únicamente en la merienda y no después de las comidas)
Y ya que estoy, os pregunto algo más. Hace poco he descubierto los panecillos fitness del lidl. Se anuncian como altos en proteínas y bajos en hidratos. Por internet he encontrado la lista de ingredientes y la información nutricional, pero no oficialmente de su web: fatsecret.es/calor%C3%ADas-nutrici%C3%B3n/lidl/pan-fitness/100g por lo visto son bastante altos en grasas, y me preguntaba si podíais arrojar un poco de luz sobre el tema.
Muchísimas gracias por vuestro trabajo, servís de gran ayuda! Feliz Navidad!!
Buenos días, María del Mar 🙂
En primer lugar, ¡gracias por tu confianza y por compartir con nosotros tu evolución!
Perder cinco kilos es muestra de constancia e ilusión, y te felicitamos por ello 🙂 Te animamos también a seguir manteniendo un estilo de vida saludable y a que nos consultes cualquier duda que vaya surgiendo, ¿vale? 🙂 🙂
Vamos allá con estas que planteas:
Alguna tarde podrías tomar un dulce como un par de bombones o mazapanes o un polvorón acompañado de una infusión o de un café solo y no haría falta que compensaras quitándote nada más 🙂 Digamos que puntualmente harás una merienda alternativa debido a las fechas que tenemos, jeje!!
Con lo golosos que somos por aquí te entiendo perfectamente 😀
En cuanto al pan que nos comentas, la verdad es que no lo conocíamos. Echando un vistazo a la composición vemos que efectivamente contiene muchas más proteínas que otros panes similares, menos carbohidratos y de grasas tiene un nivel similar a otras variedades.
El tema aquí es determinar si realmente hace falta un consumo de proteínas como el que ofrece.
100 g de ese pan aportan las mismas proteínas que un filete de carne.
Hace unas semanas hablábamos del tema en un post muy chulo en que el exponíamos con un ejemplo y con datos recientes que la ingesta de proteínas de los españoles es mayor de la que necesitamos de verdad.
Un exceso de proteínas solo hará trabajar peor a nuestro organismo (forzamos a nuestros riñones e hígado) y si no quemamos la energía que nos aportan acabarán transformándose en grasas que se acumularán en el tejido adiposo.
(Te dejo el enlace: elblogdeladietaequilibrada.com/2016/11/cuantas-proteinas-debemos-tomar.html)
Para elegir un buen pan de molde deberíamos fijarnos en tres datos fundamentales:
1. Las calorías que aporte por ración (una rebanada de unas 60 calorías sería estupenda, y si es un bollito hasta 100 calorías).
2. Las grasas y en concreto las grasas saturadas: cuantas menos, mejor.
3. El contenido en azúcares siemples, de nuevo: cuantos menos, mejor.
Con esos tres datos en mente podremos elegir la variedad más saludable 🙂
¡Un fuerte abrazo y hasta pronto!
María.